Otra forma de ver las direcciones postales.

Si buscamos la definición de dirección postal dentro del diccionario de la RAE encontraremos que la acepción 9 de la definición de dirección es la que más se acerca a la idea:

9. f. Señas escritas sobre una carta, fardo, caja o cualquier otro bulto, para indicar dónde y a quién se envía.

Si le quitamos el componente del destinatario a la dirección postal nos queda la dirección a secas que nos indica el lugar físico de destino, y en cierta manera las instrucciones para llegar al mismo. Si consultamos la wikipedia, en el artículo correspondiente a la dirección (versión en inglés) obtenemos la siguiente definición traducida:

Una dirección es una colección de información, presentada en un formato mayoritariamente fijo, usado para describir la ubicación de un edificio, vivienda, otra estructura o una parcela de terreno, generalmente la utilización fronteras políticas y nombres de la calle como referencias, con otros identificadores como números de apartamento o la casa.

Tradicionalmente las direcciones postales se han tratado como cadenas de texto, colecciones de nombres que cuando se juntan toman sentido como dirección. En la presentación de la ponencia «Modelos de datos sobre direcciones postales» [2] de D. Andrés Valentín González se da la siguiente definición de dirección:

Una dirección es un conjunto de elementos informativos de uso común que permiten localizar en el territorio un objeto o un suceso.

En dicha presentación también incide en la necesidad de tratar los componentes de una dirección como objetos geográficos. Yo quiero ir un poco más allá:

Cada elemento que compone de la dirección efectivamente tiene una componente geográfica, aunque esta no este perfectamente definida. También tiene otras características como su nombre, un tipo dentro de una clasificación, etc… que han podido ser atribuidas directamente o a lo largo del tiempo a través de los usos y costumbres.

Todas estas características en su conjunto son las que definen cada uno de los elementos que componen una dirección resultando estos en una idea/representación que identifica de forma más o menos imprecisa una ubicación del terreno. Para lograr más precisión se suelen juntar varios de estos elementos, mediante un método que podríamos denominar de aproximaciones sucesivas (dar más detalles), para al final, siguiendo una cierta estructura formar una dirección.

Continuando con esta filosofía de aproximaciones sucesivas podríamos identificar una ubicación en el terreno de forma que fuéramos, de lo más general a lo más concreto, simplemente añadiendo más elementos y teniendo en cuenta que estos elementos tienen una relación jerárquica de continencia geográfica. Es decir, un elemento está contenido geográficamente por otro que se considera de nivel superior: un país tiene en su interior provincias, que a su vez tienen en su interior municipios, que a su vez tienen vías, portales, escaleras, pisos…

Una dirección como recorrido de un grafo.

Teniendo en cuenta esta relación jerárquica de continencia geográfica podemos modelar cada elemento de la dirección como un nodo de un grafo. Para una única dirección el grafo resultante será un grafo lineal. Recorriendo este grafo de un extremo a otro obtendremos los elementos que componen la dirección para luego representarla de la manera adecuada.

Dirección como grafo lineal
Dirección como grafo lineal

El grafo anterior se puede generalizar añadiendo nodos, que debido a su relación jerárquica formarán un grafo de tipo árbol. La altura o cantidad de niveles de dicho árbol dependerá de que cantidad de elementos utilicemos para definir nuestras direcciones, y el número de hojas serán tantas como lugares identifiquemos con una dirección.

Direcciones como grafo árbol
Direcciones como grafo árbol

Para obtener una dirección bastará con recorrer el árbol entre la raíz y las hojas y representar la información de la manera adecuada. De igual manera se pueden obtener grados de vecindad o navegación recorriendo el grafo.

Cosas a considerar.

Sobra decir que esto no es un artículo académico por lo que ha de considerarse como no formal. El objetivo buscado es el de compartir la idea de ver una dirección como el recorrido de un grafo que aunque se encuentre implícita en la estructura de una dirección, no la he encontrado expresada de esta forma en ningún sitio.

Dicha idea surge a partir de la investigación para desarrollar un interface para la captura de direcciones en proyectos de despliegue de redes de acceso para telecomunicaciones. La idea del recorrido del grado aparece de manera natural, de igual forma que un cartero atraviesa el territorio para entregar una carta, siguiendo las indicaciones consignadas en la misma.

Debido a su origen he de indicar que el resultado está muy influido por la estructura de GESCAL[3], además de por experiencias propias en el diseño, y la personación previa al mismo en el área afectada, de múltiples proyectos de distribución de telecomunicaciones.

La idea expresada sería valida para zonas urbanas de España aunque podría no serlo. Pero el considerar una dirección como una estructura jerárquica facilitaría mucho la implementación de Linked Data sobre direcciones y servicios REST para su acceso.

Referencias:

  1. Wikipedia: Address (geography) http://en.wikipedia.org/wiki/Address_(geography)
  2. «Modelos de datos sobre direcciones postales» D. Andrés Valentín González http://www.juntadeandalucia.es/institutodeestadisticaycartografia/formacion/2012/normalizaciongeografica/ponencias/AValentin.pdf
  3. Entendiendo GESCAL http://agus.tinproject.es/2013/02/14/entendiendo-gescal/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*